Con la introducción de las nuevas tecnologías y todo lo relacionado con el entorno virtual, el concepto de metadatos ha adquirido un significado especial. Su uso está muy extendido en el sector informático y siempre se refiere a datos que se utilizan para describir otros tipos de datos.
El término "metadatos" se acuñó en los años 60 para describir una colección de datos, pero sólo ahora se está haciendo más común en el mundo virtual.
Algunas de las características más útiles de una buena gestión de metadatos para mejorar los procesos de gobierno y gestión de datos son
Facilita la búsqueda y el análisis: los metadatos ayudan a encontrar y localizar los datos. Una buena gestión de los metadatos también facilita el análisis del historial de datos desde la fuente, facilitando las funciones de auto documentación, conversión, análisis e informes.
Facilita la normalización: al eliminar errores e incoherencias, la normalización de los datos mejora la calidad de los mismos a lo largo de su ciclo de vida. Gestionar los metadatos en un repositorio central nos da una visión más completa del ciclo de vida de los datos, desde su creación hasta su uso, y nos permite controlar el proceso.
Apoyo a la integración: en la integración híbrida, los metadatos son cruciales. El uso de un repositorio central de metadatos para compartir datos entre los usuarios de TI y de la empresa facilita la gestión y las mejores prácticas. Se utiliza en arquitecturas híbridas para mejorar la gestión de los datos de forma integrada.
Gestión de cambios: especialmente en entornos complejos, la gestión de metadatos proporciona la visibilidad y el control necesarios en un entorno de integración de datos empresariales. Al automatizar el análisis de impacto, podemos identificar los cambios en las aplicaciones y tomar medidas para resolver los conflictos.
Mejora de la seguridad: cuando se realizan cambios, una buena gestión de los metadatos protege los datos críticos para la empresa y favorece el cumplimiento general.
Mejora de los informes: con esta sencilla intervención, los datos son de alta calidad y los procesos se desarrollan sin problemas, lo que lógicamente da lugar a informes más fiables. En general, una buena gestión de los metadatos garantiza la seguridad y fiabilidad de los datos.
Desarrollo más ágil: el acceso inteligente a los metadatos, por ejemplo en un entorno híbrido integrado, aumenta la productividad de los desarrolladores y reduce el tiempo necesario para implementar la conectividad. Esto reduce los costes de cambiar de una plataforma a otra.
Mejor gestión de datos: la gestión de metadatos en un entorno estandarizado a través de un repositorio central es esencial para aplicar un programa eficaz de gestión de datos. Las ventajas de la gestión de metadatos incluyen una mejor visibilidad del rendimiento de los distintos modelos y la gestión de las diferentes fuentes de datos, lo que permite una gestión centralizada y mejores prácticas. Pero igual de importante es la gestión adecuada de los metadatos.